¡Lo que me inspira!

jueves, 11 de noviembre de 2010

Romanticidio


Saltar al vacío con los ojos cerrados desde la arista del precipicio más profundo, saltar sin pesar en la consecuencia inevitable al golpear el fondo con el cuerpo desnudo, saltar con la convicción de que el amor nos mantendrá en el aire…

Tomar la rosa con los cardos más agudos y pronunciados, estrecharla en la palma con la fuerza descomunal del aferrado a la línea de vida, estrujarla con la plena entereza de que solo el amante consumado es capaz de sortear tal dolor…

Caminar sobre las brasas del infierno con las plantas desnudas, caminar sin detenernos a imaginar las terribles ámpulas que estallaran la suave piel de nuestro cuerpo, caminar con la promesa en mente de que una caricia será suficiente para protegernos…

Beber el más corrosivo y letal veneno, beber sin temor al fuego que se desatara en nuestras entrañas, beber sin control cual si fuese agua que apacigua una sed inmensa, beber sin tregua hasta consumir la última gota ya que un beso será suficiente antídoto…

Clavar la daga más punzante, enterrarla con fuerza y girarla hasta que arranque el corazón del cuerpo, extirpar el órgano que es símbolo del amor por solo placer de hacer un regalo, ofrecerlo a quien suponemos nos ama con la idea de que en sus manos seguiremos con vida…

Subir al cielo para arrancar las estrellas y bajarlas a los ojos del amor verdadero, subir apilando ilusiones, momentos, caricias; frases de amor elaboradas al calor de un momento, ir tan alto sin temer a la caída, confiando en la estabilidad de la Historia de amor que construimos…

Tomar la pluma de un pavorreal y escribir sonetos usando por tinta la sangre de nuestras venas, dejar correr la sangre hasta que se empapele un camino que conduzca al edén, exprimir la última gota para rematar con un te amo ¡seguiremos vivos si recibimos una igual respuesta!

Tomar la vida entera y apostarla en un juego de azar, tomar la vida entera apostando la juventud, la libertad y la individualidad, esperando por premio una nueva vida colmada de riqueza y abundancia, pero nunca pensando en la tragedia de mal invertirla…

Tomar el cuerpo y entregarlo al fuego del deseo, tomar el cuerpo y fusionarlo con un segundo esperando de esta unión la creación de un nuevo ser con alma mixta, tomar el cuerpo y entregarlo sin pensar en el horror de ser solo usado, sin temor al engaño…

Todo esto podría parecer la receta casi perfecta para una muerte segura, pero ninguna de estas es garantía absoluta, solo tus palabras hirientes e incomprensivas, solo tus desprecios y enojos, solo una mirada fría y corta basta para que seas mi Romanticida...