¡Lo que me inspira!

viernes, 10 de febrero de 2012

Nupcias con la muerte




Fiel compañero, pieza divina que pretende engarzarse a mí tacto, anillo místico, ¿Cuántos han querido escapar de ti? nunca puedo apartarme de tu vigilante fulgor, noche a noche me seduces, me acaricias, me sumerges en tu inerte esencia, y dejas a mi ser por un momento acompañarte. 

Vigilas mis pasos, tomas mi mano y me guías por caminos que llevan a tu encuentro, gracioso sonríes, y ante mis ojos radiantes desnudas tu presencia, sutil y descarado, amante de miles de formas y rostros, especial y absoluto, único e irrepetible, eres medida justa y única de todo ser.

Tus fríos destellos, me recuerdan las partida de tantos que ame, ¡Te repudio y maldigo! Por haberles amado antes que a mí. Tu frio tacto, me recuerda la partida de tantos que odie, ¡Te agradezco y bendigo!  Vivo consiente de tu presencia, pero ignoro tus designios.

Soy el mozo que teme el momento en que se perderá en ti, guardo los días en que me atormentas en la oscuridad de mí ser, tus memorias se entierran en el corazón y en la mente, pero les cubro de cotidianeidad para existir en aparente paz, frio en apariencia, en tacto, en esencia.

Eres tesoro para el que sufre, eres maldición para el que te reniega, eres voto fiel que no desprecia a nadie en este mundo, vida ceremonial cotidianeidad de lectura de pasajes y cosmologías, preparen el alma para su entrega final,  preludio de la consumación donde este amante se despojara de la carne viva.